El indio Kailash Kalau Singh hizo una seria promesa: no bañarse hasta tener un hijo varón, y en la espera han pasado 35 años sin tocar el jabón... y sin poder tampoco lograr el ansiado deseo. Aconsejado por un adivinador de que si no se bañaba sería bendecido con un hijo varón, Kalau inició así su promesa que le ha resultado onerosa, ya que no sólo perdió su comercio por su apariencia poco saludable, sino genera profundo malestar en su familia.
Para Kalau, los 35 años sin bañarse no parecen haberle dado resultado. A esta altura, dice no recordar cómo todo comenzó, aunque refiere que toma baños de fuego, al pararse en un pie al lado de una hoguera mientras reza al dios Shiva.
Texto: Johanna Galdame
¡Treinta y cinco años sin bañarse!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario