La Trampa

¿Hasta que punto un rumor puede llegar a condenarnos de por vida? ¿Un simple olvido o una tendenciosa filmación lograrán que tomemos decisiones que van en contra de todos nuestros valores? Estas y otras preguntas similares plantea el autor John Grisham en su más reciente libro, “La Trampa”.

El protagonista es Kyle McAvoy, un joven de veinticinco años recién graduado de la facultad de Derecho que ve sus sueños de libertad y trabajo comunitario truncados cuando un fantasma de su pasado decide regresar. Tal como nos enteramos por boca de Bennie, la cara visible de la red de extorsión que se encuentra tras la contratación de Kyle por parte del bufete Scully & Pershing, una ex compañera universitaria tiene férreas intenciones de acusar formalmente de violación a Kyle y a otros tres amigos. El único modo de que el video no llegue a las voraces fauces de Internet y arruine de una vez y para siempre la imagen pública del joven abogado, es que éste acepte el esclavizante trabajo en el estudio jurídico internacional y filtre información en uno de los casos más importantes de los últimos años. Muy pronto, dos compañías armamentísticas relacionadas con el Pentágono y el gobierno del Tío Sam estarán por quitarse los ojos en una fastuosa lucha legal, y alguien está interesado en obtener datos confidenciales antes que nadie. ¿Kyle romperá su pacto deontológico a cambio de un futuro seguro o preferirá arriesgarse con la verdad por muy endeble que está pueda llegar a parecer?

El autor de recordados títulos como “El Informe Pelícano” o “Fachada”, narra con vértigo y buen pulso la carrera de Kyle por encontrar la luz al final de un oscuro presente. Nada parece sencillo y eso es fácilmente palpable para quien se involucra con la historia. No parece ser mucho lo que un sujeto solo e indefenso puede hacer frente a una maquiavélica organización de profesionales del chantaje. Como bien dijo la revista Time, esta obra es para leer de forma compulsiva.

Texto: Damián Serviddio